A continuación expongo el método más sencillo y también el más utilizado para construir un caja nido.
Esta es una caja del llamado tipo "buzón", por su forma. Se obtiene a partir de una sola pieza de madera de 1,50 m de largo, por 15 cm de ancho, por 2 cm de grueso. Una vez ensamblada quedaría como en la foto de abajo. En el techo y contra la trasera colocaremos una bisagra o un trozo de cámara vieja de una rueda para poder abrirla. Para alargar su durabilidad conviene darle un par de manos de aceite de linaza o barniz no tóxico.
El tamaño del orificio de entrada variará según las especies que deseamos acoger, 28 mm para el herrerillo común y el carbonero garrapinos y 37 mm para el carbonero común, colirrojo o gorrión. Para otras especies como la lavandera, el papamoscas, o el petirrojo es mejor hacer una entrada amplia tipo balcón, para ello bastará con cortar la pieza del frente a la mitad y dejar así toda la parte superior abierta.
La mejor época para colocar las cajas nido es el otoño, así las aves la usarán como refugio invernal y tendrán tiempo suficiente para acostumbrarse a ellas hasta la primavera. El orificio de entrada se ha de colocar orientado hacia el sol de mediodia y cerciorarse de que queda fuera del alcance de gatos u otros depredadores.
Es conveniente limpiar el nidal después de cada temporada para eliminar los parasitos.